El Índice de Progreso Social mide rigurosamente el desempeño de los países en un amplio rango de aspectos de desempeño social y ambiental, los cuales son relevantes para países en todos los niveles de desarrollo económico. Facilita una evaluación no solo del desempeño absoluto del país, sino también de su desempeño relativo en comparación con sus pares económicos. Gobiernos y empresas tienen las herramientas para monitorear el desempeño social y ambiental de forma rigurosa, y tomar mejores decisiones en cuanto a inversión y política pública. El índice de Progreso Social además evalúa el éxito de un país a la hora de transformar el progreso económico en mejores resultados sociales; El Índice de Progreso Social provee un marco concreto para entender y después priorizar una agenda de acciones que impulsen tanto el desempeño social como el económico.